Para la mayoría de los adultos, el consumo moderado de alcohol no es peligroso. Sin embargo, aproximadamente 17.6 millones de adultos en Estados Unidos son alcohólicos o tienen problemas con el alcohol. El alcoholismo es una enfermedad con cuatro características principales:

Ansia: una fuerte necesidad de beber

Pérdida de control: incapacidad para dejar de beber una vez que se comenzó.

Dependencia física: síntomas de abstinencia, tales como nauseas, sudoración o temblores después de dejar de beber.

Tolerancia: la necesidad de beber cantidades de alcohol cada vez mayores para poder sentir el efecto .

El alcoholismo conlleva muchos peligros serios. Beber en exceso puede aumentar el riesgo de padecer algunos cánceres. Eso puede causar daños en el hígado, el cerebro y otros órganos. Puede provocar defectos congénitos. Aumenta el riesgo de muerte por accidentes de tránsito y también otras lesiones, así como el riesgo de homicidios y suicidios.