ENFERMEDADES AUTOINMUNES: HIPOTIROIDISMO DE HASHIMOTO.

¿QUÉ ES EL TIROIDES Y PARA QUE SIRVE?

La tiroides, de la que sólo nos acordamos cuando funciona mal, es una glándula endocrina situada en el cuello. Su principal función es la producción de hormonas, principalmente, tiroxina y triyodotironina, que regulan el metabolismo basal y el crecimiento y afectan a la mayor parte de las funciones corporales.

HIPOTIROIDISMO DE HASHIMOTO

El síndrome de Hashimoto, es una enfermedad autoinmune. Esto significa que el sistema inmune del cuerpo (que generalmente protege el cuerpo y le ayuda a combatir enfermedades) produce anticuerpos que atacan la glándula tiroides, lo que hace que no produzca suficiente hormona (esto se conoce como hipotiroidismo).

La enfermedad de Hashimoto es la causa más común de hipotiroidismo y afecta entre el 0.1 y el 5% de todos los adultos en los países del hemisferio occidental.

SÍNTOMAS HIPOTIROIDISMO DE HASHIMOTo

  • Estreñimiento
    Dificultad para concentrarse o pensar
    Cuello grueso o presencia de bocio
    Fatiga
    Pérdida de cabello
    Menstruación irregular y abundante
    Aumento de peso leve
    Rigidez articular
    Hinchazón facial

DIAGNÓSTICO HIPOTIROIDISMO DE HASHIMOTO

El diagnóstico se realiza mediante análisis de sangre:

La prueba de TSH (hormona estimulante de la tiroides): Esta prueba mide la cantidad de TSH que está produciendo la glándula pituitaria. Un nivel elevado de TSH significa que la tiroides no produce suficiente Tiroxina (T4)
La prueba de T4 (tiroxina): Un nivel bajo de T4 “libre” hipotiroidismo.
La prueba de sangre para detectar anticuerpos de anti-peroxidasa tiroidea (anti-TPO): detecta la presencia de anticuerpos que atacan la tiroides. Estos anticuerpos normalmente indican la presencia de la enfermedad de Hashimoto en pacientes hipotiroideos.

HIPOTIROIDISMO DE HASHIMOTO Y SENSIBILIDAD AL GLUTEN

Esta enfermedad es considerada como incurable y para su tratamiento se prescribe hormona tiroidea T4 para nivelar las hormonas tiroideas, esperando que esto conlleve una bajada de anticuerpos.

La “buena noticia”: los últimos estudios asocian la sensibilidad al gluten a la enfermedad de Hashimoto, por lo que reduciendo el consumo de productos con gluten, remitirían los síntomas de la misma.

¿Pero cómo es posible? Se trata de una confusión por parte de nuestro sistema inmunitario: la estructura molecular de la gliadina (porción protéica del gluten) es muy parecida a la de la glándula tiroides.

En personas con sensibilidad al gluten, fracciones de gliadina pueden atravesar la barrera protectora del intestino (fenómeno conocido como intestino permeable) y entrar en el torrente sanguíneo. Su sistema inmune, para defenderse, no sólo ataca a las gliadinas, sino también al tejido tiroideo, tan similar al de las gliadinas.

Teniendo esto en cuenta, y que la respuesta inmunitaria al consumo de un producto con gluten puede tener eco en nuestro organismo hasta seis meses después de consumirlo, lo recomendable, sería eliminar el 100% del gluten de la dieta de las personas afectadas por el síndrome de Hashimoto.